Hace unas semanas comenzamos a hacer un repaso de las rentabilidades que estaríamos obteniendo, en el momento actual, con los distintos tipos de inversión en REIT (ver post
Rentabilidades actuales de los REIT -1). En relación con este tema, en el artículo de hoy vamos a concluir con la revisión de los diferentes productos existentes en el mercado.
Tal y como veíamos en su momento, las principales alternativas de inversión indirecta en propiedades inmobiliarias consisten en la compra de acciones de sociedades REIT o en la adquisición de participaciones de fondos REIT.
Adicionalmente, también tenemos la posibilidad de invertir en este
tipo de sociedades comprando participaciones de ETF que replican el
comportamiento de índices REIT (índices estandarizados compuestos
únicamente por sociedades REIT). Su ventaja, frente a los fondos, es que
tienen menores comisiones gestión. La desventaja es que, en España, no
se pueden hacer traspasos entre ETF sin tributar a Hacienda.
Las rentabilidades anualizadas (a 5 años) de los ETF más famosos del mundo desarrollado son las siguientes.
ETF REIT |
% 5AÑOS |
ProShares Ultra Real Estate |
+48% |
iShares Retail Real Estate
Capped |
+32% |
Vanguard REIT Index |
+29% |
First Trust S&P REIT Idx |
+28% |
Power Shares KBW Prem Yield Eq
REIT |
+10% |
Como vemos, las rentabilidades son muy
superiores a las de los fondos de inversión y, más o menos, equivalentes
a las de las mejores sociedades REIT. Por ejemplo, si hubiésemos
invertido 10.000 euros en el ETF "iShares Retail
Real Estate Capped" hace 5 años, hoy en día tendríamos un capital de
40.000 euros, esto es, un espectacular +300% en 5 años. Puntualizar que
el ETF "ProShares Ultra Real Estate" opera con apalancamiento de dos
veces, es decir, duplica la rentabilidad de su índice de referencia (Dow
Jones US Real Estate SM Index), cuya plusvalía real fue del +24%.
Existe
también la posibilidad de acceder a este mercado mediante los fondos
inmobiliarios. Estos fondos, una vez obtenido el capital necesario, se
encargan ellos mismos de ejecutar la compra, alquiler o venta de
propiedades, en vez de invertir ese dinero en sociedades que se dediquen
a la inversión inmobiliaria (como hacen los fondos REIT). Sin embargo,
no es muy recomendable trabajar con ellos, pues suelen tener una
liquidez muy limitada y no sería de extrañar que nuestro capital quedase
cautivo durante los ciclos bajistas del mercado (como ya ha ocurrido
alguna vez en el pasado).
Por tanto, podemos observar
que no tiene mucho sentido decir que el mercado inmobiliario está de
capa caída desde hace varios años. Si somos capaces de levantar un poco
la mirada y observar más allá de nuestras fronteras, no nos será difícil
encontrar buenas rentabilidades al alcance de nuestra mano.
Además,
tal y como hemos visto, existen muy buenas alternativas a la compra
directa de bienes inmuebles. Como las más relevantes, tenemos la
inversión en sociedades REIT (o SOCIMI en España), en fondos de
inversión REIT o en ETF sobre índices REIT. No es necesario que nos
desplacemos a Inglaterra o a EE.UU. para seleccionar las propiedades en
las que queremos invertir, estas herramientas se encargarán de ello por
nosotros.
En
un futuro post analizaremos un detalle importante: la correlación
existente entre la bolsa, los bienes inmuebles y las sociedades REIT.
Conocer dicha correlación nos ayudará a decidir si merece la pena (o no)
incrementar la diversificación de nuestra cartera con la inclusión de
fondos REIT en la misma. Como es evidente, es clave poner de manifiesto
este punto.
Por hoy, es suficiente con lo indicado.
Básicamente, queríamos hacer un repaso de las rentabilidades que se
pueden obtener, actualmente, mediante la inversión en productos REIT
(independientemente de que hablemos de sociedades, de fondos o de ETF).
Saludos.